Puedo oir tu voz diciendo el adios
destruyendo toda la ilusión.
Ya no quiero hablar ni quiero pensar
ni siquiera puedo imaginar.
Más vale una sonrisa triste, que la tristeza de no poder sonreir
sábado, 28 de enero de 2012
martes, 24 de enero de 2012
Suscribirse a:
Entradas (Atom)